Cubanistica y otras razones: noviembre 2008

viernes, 21 de noviembre de 2008

De negros, blancos y Obama

A principios de mi vida laboral tuve a un corpulento, estentóreo y egocéntrico mulato como compañero de trabajo, cuya copiosa biografía incluía hasta un Doctorado en Ciencias. Este señor usaba, con visible deleite, la frase “Ser negro, más que un color de piel, es una actitud ante la vida”. Ésta, convendrán muchos, es quizás una de las ideas más racistas que se puedan concebir. Conozco otra que la equipara, pero ahora no viene al caso.

Lo que sí viene al caso es la preocupación de muchos porque el Presidente electo Barack Obama es negro. Claro, si uno se aferra al estereotipo del guetto, de la cultura rap callejera, del pandillero, la idea es, cuando menos, inquietante. Pero Obama es un graduado de la Universidad de Columbia y de la Harvard Law School, dos de las Universidades de la superelitista Ivy League. Fue profesor en la Escuela de Leyes de la Universidad de Chicago y, posteriormente, Senador de los Estados Unidos de América. Hoy es el Presidente electo de este país. A esas alturas que le guste el rap sería un mal menor.

He ahí un negro de piel pero con actitud de blanco, seguramente diría mi racista ex-compañero de trabajo, mulato de barrio marginal devenido en calificado y capaz profesional. En esa tónica se pudieran entonces enunciar modus vivendi tales como white trash, wet back, chicano o latino, pero esa gente pudiera tornarse blanca, si cambiara de actitud. Triste filosofia.

Y aqui viene al caso retomar lo de la otra frase más racista que he escuchado, ésta dicha por un cubano blanco, emigrado en los Estados Unidos: “Yo pasé mucho trabajo para vender mi primera casa, porque venían a verla muchos compradores negros y yo no podía hacerle esa mierda a mis vecinos: venderle la casa a un negro” .

A mí me causa escozor escuchar cosas como esa, dichas por personas que son, para colmo, parte de minorías despreciadas en este país. Definitivamente nos hace falta un ejercicio de tolerancia supremo, por más que no nos guste el rap o el reggeton.

Yo estoy en plena ejercitación.