Cubanistica y otras razones: enero 2008

martes, 29 de enero de 2008

Un clásico reloaded

El gusto por la música rock que adquirí en mis años mozos todavía lo conservo, mejorado y enriquecido en el tiempo. Tengo la suerte de pertenecer a la generación que disfrutó la música de dos décadas fabulosas para la música en general y para la música rock en particular: los 60 (era muy niño, pero para eso uno tiene hermanos mayores) y los 70, por supuesto, cuando unos iban tras la música disco y otros tras Deep Purple, Led Zeppelin, Queen, AC/DC y tantos que no alcanza el blog (ni el tiempo).

El hard rock fue mi primer amor, pero con el tiempo fui escuchando otras cosas y, en algún momento, llegué al southern rock. Así conocí a The Altman Brothers Band, Atlanta Rhythm Section, Black Oak Arkansas, ZZ Tops, pero sobre todo a un clásico de clásicos: Lynyrd Skynyrd, un grupo que fue leyenda por la trágica muerte en un accidente de sus principales integrantes antes de serlo por su música.

Hay mucho que escuchar de esta banda, todas esas canciones con una marcada influencia del guitarreo estilo blues y muchas pudiera recomendar, pero su himno, su legado a la historia del buen rock, es indudablemente Sweet Home Alabama.

Esa es para muchos la canción perfecta, la que nunca aburre, con ese inconfundible obstinato de guitarra y que siempre produce el mismo efecto excitante y sensual. Y no es posible mejorar lo perfecto. Pero en el intento pueden surgir propuestas excelentes...

miércoles, 23 de enero de 2008

El breve espacio en que no está... la respuesta

Estaba viendo en los Mikis un video donde un periodista trata de entrevistar a Pablo Milanes



Toda vez que acerca de la música y lírica de Pablo ya se ha dicho todo, el periodista quiso hacer la pregunta buena, la interesante, pues Pablo en su tiempo libre es diputado a la Asamblea Nacional de Cuba. Y así, a la salida de un concierto, y teniendo en cuenta ambas actividades de Pablo, el periodista le preguntó que como un artista tan bueno se identificaba con una causa tan mala. Y el diputado, poeta y trovador le dijo:

- No estoy de acuerdo contigo, y si de entrada no estamos de acuerdo, no podemos tener una conversación (¡apretó el socio...!).

- Te estás valiendo de la sorpresa y, si te contesto como debe ser, vas a editar la respuesta.

Y se fue.

Otras personas que pasaban intervinieron, defendiendo a Pablo poeta y trovador, pues al pobre diputado lo emboscaron y no era momento de preguntas. “A un artista no se le entrevista de ese modo, pues está emocionado, etc. y eso es manipular la información”, le dijo al periodista un indignado señor que dijo ser intelectual y escritor. No aclaró cual es el modo correcto de entrevistar a un artista, por cierto.

En fin, para mitigar la vergüenza de no responder una pregunta sencilla, yo le sugiero a Pablo algunas respuestas geniales:

- Para mi no es una causa mala
- Porque soy fidelista y comunista
- Porque creo en todo eso y no me lo cuestiono
- Porque me da la gana
- En realidad no soy tan bueno, je, je…

En fin, es imposible defender lo indefendible y todo este asunto termina como los debates teológicos: es una cuestión de fe. Pero uno esperaría más de un flamante diputado a la Asamblea Nacional de Cuba.

viernes, 18 de enero de 2008

La triste consecuencia de vivir informado…

Hace apenas 60 años la gente fumaba sin miseria, en cualquier lado, en cualquier cantidad, pues todavía un médico aburrido y aficionado a la estadística no había relacionado la incidencia de cáncer de pulmón con el hábito de fumar. Además, después de relacionarlo, le costó trabajo divulgarlo. Hoy, al hábito de fumar le achacan la mitad de los males humanos y la gente fuma cada vez menos.

Yo, por cierto, lo dejé hace casi 5 años y la verdad que fue lo mejor que hice; ahora no soporto la peste a humo. Nada, que dicen que no hay peor enemigo que el antiguo amigo.

Antes también se comía sin remordimientos. El gordo de puerco en el arroz amarillo, los salamis, jamones, tocinos, el pellejo del puerco asado, la salsa grasosa y rojiza de los fricasés cubanos, la salsita del bistec en el fondo de la sartén, los plátanos fritos (¡cualquier cosa frita!), las torrejas (¡cualquier cosa dulce!), los quesos, mantequilla, leches enteras, salchichas, chorizos, butifarras, salchichón y todas esas cosas grasientas, aromáticas, deliciosas, que ahora son… una tenebrosa fuente de colesterol.

Coño, que uno ahora no puede comerse unas costillas de puerco fritas, rociadas con generoso mojo de naranjas y ajo, sin que se te quite de la cabeza que tienes 260 no se qué de colesterol en la sangre, pero que, además, como sino bastara, hay varios tipos de colesteroles, malos y buenos, y que el malo se convierte en bueno si te pones a correr 40 minutos en las mañanas (que horror…) y que, como si fuera poco, hay otras cosas que se llaman triglicéridos y fosfolípidos y urea y el coño-e-su-madre que te joden todo cada una de ellas por separado y que si se juntan pues entonces estás completamente jodido.

Ahora me doy cuenta que nuestros abuelos y anteriores se morían sin saber por qué, pensando en que le quitaran lo bailado, y también lo comido, que carajo, sin atormentarse calculando que si hubieran comido lechuga con agua hervida y brócoli (más horror…) y pescado blanco hervido sin sal se hubieran muerto sanos y no con la sangre y las arterias repletas de la grasa de los miles de puercos que se comieron en infinitos domingos festivos.

Bueno, ese es el hecho obvio, tengo el colesterol alto. Y si quiero morirme sano debo dejar de comer cosas buenas para empezar a comer cosas sanas y desayunar avena y correr en las mañanas para, además, descargar el estrés.

Vaya, que tengo que decirlo, que mierda tanta información… Aunque quizas valga la pena comer mas vegetales.


jueves, 17 de enero de 2008

Silvio y su nación

Silvio Rodríguez ha decidido que los presos cubanos son un público que necesita de sus canciones, pues son parte de la nación cubana . Es decir, esa parte de la nación que roba, estafa o asesina a esa otra parte que ya debe estar saturada con la poesía y música de Silvio.

No creo que lo muevan en este propósito intereses mercantiles pues, por una parte, la nación presa no tiene poder adquisitivo (ni creo que esté dentro de sus prioridades) para comprar Cd´s de Silvio, el cual además tendría que competir en ese mercado con La Charanga Habanera, la Original de Manzanillo, Daddy Yankee o alguien que se parezca. Por otra parte, tampoco creo que a Silvio le haga falta ese hipotético mercado para seguir su buena vida.

En fin, no sé que quiere Silvio.

Pero sería interesante, ya metidos en afanes incluyentes a nivel de nación, saber que piensa Silvio acerca de las necesidades espirituales de la parte de la nación que vive en el exilio, es decir, la nación exiliada.

Sería interesante saber, en primer lugar, si nos considera también parte de la nación cubana y que decidiera, por ejemplo, ofrecer conciertos a los exiliados cubanos en el DF o Madrid o Toronto o, inclusive, Miami, por difícil que parezca este último escenario, lo admito, pero es un buen acicate para alguien que se propone metas loables y difíciles, como conmover a la nación presa.

Además, la nación exiliada puede comprar la musica de Silvio. Aunque no esté dentro de nuestras prioridades. Pero no estaría mal para un nacionalista incluyente.